El conejo,
a lo largo de la historia, ha sido una fuente apreciada de alimento en diversas culturas. Su carne magra y su sabor suave lo han convertido en una opción culinaria versátil que ha encontrado su lugar en la gastronomía de muchas regiones del mundo. Desde platos tradicionales hasta creaciones modernas, el conejo ha dejado su huella en la mesa, destacando por su perfil nutricional.
Ingredientes:
Instrucciones:
Lo primero que vamos a hacer es el majado:
- Ingredientes para el majado:
- 2 rebanadas de pan duro
- 4 dientes de ajo
- Higadillos del conejo, limpios y cortados en trozos pequeños
- Aceite de oliva, para freir
Instrucciones para el majado:
En una sartén, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Agrega las rebanadas de pan duro y fríelas hasta que queden doradas y crujientes. Retire el pan y colócalo en un mortero.
En la misma sartén, agrega un poco más de aceite si es necesario y fría los higadillos del conejo hasta que estén dorados y cocidos por completo. Retira los higadillos y colócalos en el mortero junto con el pan frito.
En la misma sartén, agregue los dientes de ajo y fríelos hasta que estén dorados.
Agrega los ajos fritos al mortero con el pan y los higadillos.
Con un mortero y una mano de mortero, muele los ingredientes del majado hasta obtener una pasta homogénea. Si es necesario, puedes añadir un poco más de aceite de oliva.
Instrucciones para el guiso:
Lava las piezas de conejo
y sécalas con papel de cocina. Salpimienta generosamente cada pieza y luego enharínalas ligeramente.
En una sartén grande o cazuela, calienta el aceite de oliva a fuego medio alto.
Agrega las piezas de conejo
enharinadas a la sartén y dora cada lado hasta que estén doradas y crujientes. Retira las piezas de conejo doradas y resérvalas en un plato.
Vuelve a colocar las piezas de conejo
doradas en la sartén. Agrega las ramitas de romero, las hojas de laurel, el tomillo y el majado que hemos hecho anteriormente.
Vierte el vino blanco en la sartén y deja que hierva durante unos minutos para reducir y evaporar el alcohol.
Agregue el caldo de pollo o verduras a la sartén. Ajusta el nivel de líquido para que las piezas de conejo
estén casi cubiertas.
Lleva la mezcla a ebullición y luego reduce el fuego a bajo. Tapa la sartén y deja cocinar a fuego lento durante aproximadamente 30-45 minutos, o hasta que el conejo esté tierno y se separe fácilmente del hueso.
Durante los últimos minutos de cocción, verifique y ajuste el sazón con sal y pimienta según sea necesario.
Una vez que el conejo
esté cocido a la perfección, retira las ramitas de romero y las hojas de laurel.
Sirve el conejo
guisado caliente, acompañado de la salsa .
Este plato de conejo
guisado con hierbas y vino blanco es perfecto para acompañarlo con arroz, puré de patatas o verduras al vapor. ¡Disfruta de esta deliciosa receta!
Autor: Recetas Explicadas
con la colaboración de